El cuidado del medio ambiente: empresa y …

1 Las empresas y el medio ambienteEl cuidado del medio ambiente es uno de los temasconsiderados de valor en las ltimas d cadas. Diferentestipos de organismos nacionales e internacionales, estataleso privados, se ocuparon del tema y no son pocos los pro-yectos y programas que se han propuesto para considerar-los o implementarlos, aunque con resultados dis relaci n a este tema aparecieron especialmenteenfrentados las empresas llamadas extractivas, dedicadas aexplotar los recursos naturales, y los grupos denominadosambientalistas, abocados a preservar los dones de la natu-raleza. Como consecuencia se plantearon y discutieronconceptos que se refer an al futuro, tales como desarrollosustentable, sostenibilidad o valor del largo cuestiones tambi n se incorporaron a est ndaresinternacionales, y las empresas no s lo debieron verificarprocesos de calidad sino tambi n cuidado del consideraci n de estos y otros aspectos se se alan enel Pacto Global, documento de Naciones Unidas, donde seconvoca a las empresas a comprometerse con sus diez prin-cipios, que se delinean en tres grandes reas: los derechoshumanos, el mbito laboral y el medio ambiente , operandoen funci n de reglas de convivencia y bien com n.

2 Los tres principios del Pacto Global de Naciones Unidasreferidos al tema del medio ambiente 1) apoyar el enfo-que preventivo frente a los retos medioambientales; 2)adoptar iniciativas para promover una mayor responsabili-dad ambiental; y 3) alentar el desarrollo y la difusi n detecnolog as inocuas para el medio ambiente legitiman elcuidado como obligaci n mandatos sugieren preguntarse: qui nes se hacencargo de cuidar el medio ambiente ? Las respuestas sonvarias: las empresas, los grupos ambientalistas, las certifi-cadoras de calidad, as como los agentes de gobierno quecomienzan a exigir controles de cuidado ambientalmediante legislaci n nacional, provincial y municipal especialmente en lo referente a impacto ambiental comofactor preventivo y se constituyen en los protagonistasm s visibles, que se hace m s central en las zonas dondepredominan las industrias extractivas. Pero c mo participa la comunidad de la zona? Valese alar que el proceso estar a incompleto si no hubierauna mayor conciencia y formaci n de los directamenteafectados: la poblaci n.

3 Son los ciudadanos los que est ndirecta o indirectamente vinculados al tema. Una experiencia positiva en un contexto complejoAqu intentamos mostrar una experiencia desarrollada enel departamento de General San Mart n de la provincia deSalta, Argentina, que se caracteriza por una presencia fuertede empresas dedicadas a la explotaci n de petr leo y de ellas, Refinor, una destiler a de petr leo con unacontinuidad de siete a os, se dedica a la formaci n dedocentes de la zona en temas relativos a medio ambiente ; lohace mediante jornadas de capacitaci n sobre aspectos b si-Petrotecnia febrero, 200648 IEl cuidado del medio ambiente : empresa y comunidadPor la Dra. Beatriz Bali n de TagtachianTema de tapacos de la vida cotidiana, tales como el tratamiento de labasura, la protecci n de reservas naturales, el cuidado de losbienes b sicos como el agua o los bosques, entre adem s de estos aspectos puntuales, las Jornadasde Capacitaci n de medio ambiente , Comunidad yEmpresa establecieron un proceso de relaciones socialesentre sectores diferentes y esa zona geogr fica coexisten grupos muy departamento de General San Mart n est compuestopor seis municipios: Aguaray, General Ballivi n,Embarcaci n, General Mosconi, Profesor Salvador Mazza yTartagal.

4 Su poblaci n total es, de acuerdo con el censo dela o 2001, de habitantes, y est compuesta porcriollos, abor genes, residentes provenientes de otras pro-vincias, de pa ses lim trofes y nacidos y criados en la zona(NICS). Desde el punto de vista social merece se alarse que enese departamento, en el a o 2001, se registraba un 40,7%de poblaci n con necesidades b sicas insatisfechas (NBI),as como un 34% de tasa de desocupaci n, aunque en1991 era del 6%. Tambi n se observa la presencia de gru-pos combativos identificados como Uni n de TrabajadoresDesocupados (UTD) y zona hubo momentos de fuertes conflictos yadquirieron mayor visiblidad los llamados piqueteros, quecomenzaron a cortar la ruta 34 la nica desde el a o1997. Durante ese mismo a o el corte dur lo suficientepara que las localidades cercanas llegaran a quedar sinsuministros b sicos. Actualmente siguen interrumpiendola ruta como forma de protesta y reclamo, pero los cortesson de menor duraci de capacitaci nLas jornadas realizadas con continuidad desde 1999permitieron poner en contacto a distintos grupos, recono-cerse mutuamente, plantear temas de inter s com n y for-mular proyectos.

5 Las primeras acciones de este proceso fueron lasJornadas de Limpieza, que se organizaron con las escuelasde la zona en 1998. La misma se encar por la exigenciade la certificaci n de la norma ISO de realizar acti-vidades con la comunidad. Participaron grupos muy diferentes: criollos y abor ge-nes de las comunidades mencionadas, entre quienes seinclu a fundamentalmente a los alumnos, pero tambi n alos docentes, una m dica de la zona, uno de los intenden-tes, funcionarios de las intendencias, un cacique, los bom-beros, tambi n miembros de gendarmer a, voluntarios delas escuelas, as como los contratistas de la empresa a quie-nes se les pidi colaboraci n para retirar la basura en suscamiones. Tambi n directivos, personal de la destiler a ysus familiares. Llegaron a participar casi cuatrocientos chi-cos. Todos los participantes fueron organizados en gruposheterog neos, es decir, grupos de trabajo integrados porpersonas de diferentes edades y relaciones sociales y el inter s que se suscit inspi-raron las Primeras Jornadas de Capacitaci n sobre temasde medio ambiente en 1999, las que prosiguieron anual-mente.

6 Las mismas se ampliaron en 2003, cuando se agre-g un d a m s y se instalaron standsdonde los alumnospresentan sus diferentes trabajos y proyectos. En el a o 2005 participaron diecisiete escuelas (dos dePetrotecnia febrero, 2006 I49las cuales corresponden a educaci n especial3) y, adem s,la ONG ProYungas, representante de Panamerican Energy,que se dedica a la reserva de Acambuco, y un grupo devoluntarios de Aguaray. De acuerdo con el programa, el d a viernes se inici latercera exposici n sobre temas de educaci n ambiental yproyectos. Para presentar sus trabajos los alumnos realiza-ron maquetas, dibujos, esquemas, experimentos. Ellos fue-ron los protagonistas y los docentes se pusieron en unsegundo plano. Los trabajos de investigaci n se refirieron ala utilizaci n de agroqu micos, el problema de la deforesta-ci n, el tratado de los residuos, los an lisis de agua y energ asalternativas, entre otros. Tambi n se realizaron presentacio-nes sobre la reserva provincial de Acambuco, despu s dehaber realizado un trabajo de campo en esa zona.

7 En la Jornada de Capacitaci n del s bado participaron338 se alarse que la participaci n de los j venes,entre otras causas, es el resultado de la capacitaci n conti-nua de los docentes, quienes transmitieron y transmitenlas cuestiones relativas a medio ambiente a sus alumnos. Impacto social y cursos a seguirEl impacto de las jornadas en la comunidad se puedeapreciar por el aporte concreto de una de las escuelas. Susalumnos realizaron un estudio mediante relevamientos,observaciones y entrevistas que utilizaron para prepararun proyecto sobre el tratamiento de la basura en un muni-cipio. Los objetivos principales del mismo consisten enmejorar la recolecci n, generar la responsabilidad de losvecinos y, de acuerdo con los consejos brindados por unmiembro de la empresa , mostrar la posibilidad de optimi-zar los recursos existentes. La Jornadas en general pueden interpretarse como unainstancia, por ahora incipiente, de articulaci n entreEstado, comunidad y empresa , seg n plantean algunosautores como caracter stica de una buena sociedad.

8 Otro aspecto a se alar es el establecimiento de relacio-nes de cooperaci n entre sectores sociales muy diferentesy/o desiguales econ micamente (miembros de la empresa ,docentes, los alumnos, sus padres, personal de gendarme-r a, funcionarios pol ticos, etc.) y con la expectativa que stas continuar la relaci n m s firme es la que se pre-senta entre la empresa y los docentes. Las Jornadas se realizaron durante los mismos a os enque la zona padeci y padece una fuerte crisis econ micay alta conflictividad por la presencia de grupos combativoscuya modalidad de reclamo es el corte de rutas, lo queinterrumpe la circulaci n de veh culos. Sin embargo, valese alar que durante las Jornadas no se produjeron cortesque afectaran la realizaci n o la asistencia a las mismas, locual puede interpretarse como un acuerdo t cito por lapresencia de normas positivas en medio del conflicto. Elrespeto al tr nsito en esas circunstancias puede ser indica-dor de adhesi n a un valor superior la capacitaci ndocente , el que parecer a compartido por las distintaspartes en conflicto.

9 Sin embargo, una inc gnita a resolver es c mo orienta-r la empresa sus pr ximas acciones. Puede hacerlo conun sentido estricto del negocio y dirigida a la recuperaci nde los montos invertidos a corto plazo, o como una inter-venci n para el mejoramiento de la calidad de vida de loshabitantes de la regi n. El establecimiento de una red de relaciones personales,instancias resolutivas en per odos conflictivos, incipientevisibilidad de valores compartidos, leve articulaci n entresectores opuestos, entre otros, son los resultados comple-mentarios de las Jornadas de medio ambiente , empresa yComunidad despu s de siete a os de Balian de Tagtachianes doctora en Sociolog a (UCA).Actualmente es directora del Centro de Investigaciones Sociol gicas ydocente de carreras de grado y Directora del Departamento de Sociolog a y vicedecana de laFacultad de Ciencias Sociales y Econ micas (UCA). Sus ltimas publicaciones son: Responsabilidad social empresaria: unestudio emp rico de 147 empresas(2004), La responsabilidad socialde las empresas de la industria y del gas(2004) y los art culos Sociedad civil: aproximaci n anal tica y situaci n en la Argentina (2005) y Desocupaci n, pobreza y piquetes en Argentina (2005).

10 1 Las normas ISO 9000 y se requieren para garantizar calidadmediante la implementaci n de controles exhaustivos, asegur ndose deque todos los procesos que han intervenido en su fabricaci n operanadecuadamente. Las normas se refieren a un proceso productivo y desoportes. Es una norma que se aplica a la empresa . Su implementaci nasegura al cliente que la calidad del producto que l est comprando semantendr en el tiempo. 2 Grupos que manifiestan sus reclamos, cortan calles, avenidas o participaci n complementa las recomendaciones del pacto globalacerca de la no discriminaci febrero, 200650I.