La crisis francesa de los años treinta - USAL

1 LA crisis francesa DE LOS A OS treinta . Olivier Dard Introducci n El tema de la conferencia trata de la crisis de los a os treinta , especialmente del caso franc s. Pero para introducir mi charla quiero empezar con algunas observaciones a prop sito de la crisis mundial, y especialmente europea de los a os treinta . La crisis de los a os treinta fue una crisis mundial, llamada por algunos gran depresi n . Sin embargo, en numerosas ocasiones, los historiadores europeos no se han dado cuenta de la trascendencia mundial de esta crisis como muestra, por ejemplo, un libro colectivo publicado recientemente y titulado A grande depress o : pol tica e economia na d cada de 1930.

2 Su lectura permite darse cuenta de la amplitud de la crisis y de sus consecuencias en Inglatterra o Estados Unidos igualmente que en Per o en Argentina. Pero, en este interesant simo libro falta un texto sobre Alemania que es, desde un punto de vista europeo, el s mbolo de la crisis de los a os treinta . En efecto, la crisis alemana fue la m s grave. El historiador Detlev Peukert la ha calificado de crisis total ya que combinaba una crisis econ mica y social caracterizada por un paro enorme y una crisis institucional y pol tica generada por el incumplimiento de las expectativas generadas en 1919 con la formaci n de la Rep blica de Weimar. Hay que recordar que la constituci n de Weimar habia prometido, entre otras cosas, el derecho al trabajo.

3 Pero adem s, hay que tener en cuenta la crisis diplom tica y militar, especialmente con Francia porque Alemania no pudo pagar las reparaciones impuestas por el tratado de Versalles de 1919, tratado que los nazis combatieron desde sus inicios. Para Adolf Hitler y el partido nazi, el fracaso de las alternativas democr ticas de la Rep blica de Weimar le permitieron crecer desde el punto de vista electoral sobre todo a partir del a o 1930 cuando aquel partido obtiene el 18 % de los votos, convirti ndose en la primera fuerza politica dos a os despu s. En Gran Breta a, igual que en los Estados Unidos, la crisis fue grave pero fue esencialmente una crisis econ mica.

4 La situaci n de Gran Breta a era dif cil ya antes de 1929. y de hecho en las eleciones de 1928 el problema del paro se revel como un tema candente para los ciudadanos. Evidentemente, el Crack de Wall Street agrav la situaci n, pero la unidad pol tica y nacional del verano de 1931 permiti un acuerdo de las diferentes fuerzas pol ticas sobre la decisi n de devaluar la libra esterlina. El gobierno de unidad nacional impidi el desarollo de las fuerzas pol ticas extremistas y antiparlamentarias. De hecho, el fascismo y el comunismo fueron fen menos electoralmente marginales en la Gran Breta a de aquellos a os. En Francia, la situaci n fue diferente. Partimos aqu de la idea de la excepci n francesa , cuesti n que necesita una explicaci n detallada.

5 Quiero hablarles de un libro de un periodista alem n muy conocido, Friedrich Sieburg, titulado Es Dios franc s? En dicho libro comentaba que Francia en los a os 30 era el pa s donde se viv a muy bien. De hecho, el propio primer ministro conservador Andr Tardieu dec a en 1930 que Francia era un islote de prosperidad en un mundo en crisis . Estas palabras pueden resultar extra as, si nos atenemos a la idea generalizada sobre la crisis social y pol tica de la Francia de los a os 30. Pero lo cierto es que a nivel econ mico, la situaci n francesa era muy favorable, con ndices de crecimiento del 4% en 1930, una balanza de pagos muy saneada y unas reservas de oro y divisas muy importantes en el Banco de Francia.

6 Esta situaci n continu hasta la devaluaci n de la libra esterlina en septiembre de 1931 cuando la coyuntura econ mica empeor notablemente. La crisis francesa puede ser calificada de polimorfa. La historiografia, especialmente extranjera, pienso especialmente en Eugen Weber, calific el periodo de los a os treinta como un tiempo de decadencia . Una decadencia general ha suscrito Weber. El argumento de la decadencia de Francia ha sido un tema recurrente en parte de la historiograf a no s lo en los a os 30, sino tambi n muchos a os despu s. Durante la segunda guerra mundial desde Vichy hasta la resistencia se llev a cabo un proceso a los a os treinta y esta cuesti n continu despu s de la guerra con escritores como Raymond Aron y otros.

7 No ha existido en Francia una nostalgia de los a os treinta como de los a os 10 del siglo XX, los a os de la Belle poque . Incluso hoy en d a, se siguen realizando comparaciones con los a os 30, bien por los esc ndalos pol ticos-Stavisky frente a Cahuzac-, o bien por el ambiente general de la falta de decisiones pol ticas. Ciertamente, la crisis de esos a os en Francia fue una crisis econ mica combinada con cuestiones pol ticas, institucionales y diplom ticas, pero no signific el inicio de la decadencia de Francia como se sugiere por diferentes historiadores. La crisis econ mica: liberalismo, devaluaci n, subida de la tecnocracia. Las consecuencias de la crisis econ mica mundial en Francia eran consideradas graves en septiembre de 1931 tras la devaluaci n de la libra que gener graves tensiones sobre la moneda francesa .

8 En ese momento, los gobiernos y los dirigentes pol ticos plantearon la necesidad de un informe sobre la situaci n econ mica en Francia y las posibles alternativas para salir de la crisis econ mica. En aqu l tiempo, los mayores expertos econ micos eran los profesores de econom a politica de Francia, simbolizados por Charles Rist, profesor en la Universidad de Par s y especialista en los problemas monetarios. El an lisis de los expertos conclu a que la crisis econ mica era esencialmente una crisis monetaria y financiera y a pesar de su gravedad se la pod a tratar de acuerdo con los mecanismos econ micos ya ensayados en el siglo XIX, es decir, practicando la ortodoxia financiera y el equilibrio presupuestario.

9 Conviene recordar que los economistas de entonces estaban vinculados con las escuelas del liberalismo econ mico y la creencia en la autoregulaci n del sistema econ mico. En consecuencia, se alaban que se trataba de una crisis de tipo cl sico y habr a que esperar a la que la situaci n mejorara, sin necesidad de otro tipo de intervenci n gubernamental. Estas propuestas se trasladaron a la coalici n de centro izquierda integrada por radicales y socialistas que hab an ganado las elecciones de mayo de 1932 al formar un nuevo Cartel de izquierdas En ese Gobierno radical, ya que los socialistas no participar n en l, figura como Primer Ministro Edouard Herriot, que ya hab a formado Gobierno en el primer Cartel de Izquierdas entre 1924 y 1926 y hab a fracasado estrepitosamente en pol tica econ mica.

10 Por ello, ante la gravedad de la situaci n y apoy ndose en un economista pr ximo al Partido Radical, Gaston J se, opt por una pol tica econ mica muy prudente centrada en el control presupuestario y la austeridad, pero evitando utilizar el mecanismo de la devaluaci n monetaria, a pesar de que esa medida era propuesta p blicamente por pol ticos de la derecha como Paul Reynaud que habl incluso de un Asunto Dreyfus monetario . A pesar de la pol tica de austeridad presupuestaria, los gobiernos radicales entre 1932 y 1934 no consiguieron ning n xito econ mico y la situaci n no mejor nada. El fracaso de la pol tica econ mica liberal permiti la llegada de hombres nuevos, los futuros tecn cratas, entre los que cabe mencionar el grupo X-Crise -salido de la Escuela Polit cnica- transformado m s tarde en 1933 en Centro Polit cnico de Estudios econ micos.