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La enfermería de salud pœblica y las funciones esenciales de …

Rev Enferm IMSS 2004; 12(3): 159-170159 INFORMACI N GENERALI ntroducci n"Mejorar la salud de la poblaci n" es la meta del ministerioo secretar a de salud en la mayor a de las naciones. En los ltimos a os, los debates de pol tica acerca de c moalcanzar esta meta se han ampliado para incluir el tema delas funciones esenciales de salud p blica o los serviciosesenciales de salud p blica como los cimientos que permi-tir n alcanzar metas concretas. Los responsables de laspol ticas sanitarias han entendido que, sin una infraestruc-tura adecuada como la que se requiere para la prestaci n deestos servicios, ninguna administraci n podr avanzareficientemente hacia el mejoramiento de la salud paratodos. Si bien los tratamientos para enfermedades concre-tas y las actividades para reducir al m nimo los riesgosindividuales, pueden proporcionarse con xito uno por uno,no es posible que sean sostenibles sin una estructura desalud p blica organizada.

desechos humanos y de otro tipo, en particular en los medios urbanos. Segui-damente, se emprendieron iniciativas para el control de las enfermedades transmisibles por otros medios, tal como la tuberculosis. A medida que se ha avanzado en el conocimiento de los fac-tores determinantes de la salud y de las causas de enfermedad, se han amplia-

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1 Rev Enferm IMSS 2004; 12(3): 159-170159 INFORMACI N GENERALI ntroducci n"Mejorar la salud de la poblaci n" es la meta del ministerioo secretar a de salud en la mayor a de las naciones. En los ltimos a os, los debates de pol tica acerca de c moalcanzar esta meta se han ampliado para incluir el tema delas funciones esenciales de salud p blica o los serviciosesenciales de salud p blica como los cimientos que permi-tir n alcanzar metas concretas. Los responsables de laspol ticas sanitarias han entendido que, sin una infraestruc-tura adecuada como la que se requiere para la prestaci n deestos servicios, ninguna administraci n podr avanzareficientemente hacia el mejoramiento de la salud paratodos. Si bien los tratamientos para enfermedades concre-tas y las actividades para reducir al m nimo los riesgosindividuales, pueden proporcionarse con xito uno por uno,no es posible que sean sostenibles sin una estructura desalud p blica organizada.

2 M s aun, las necesidades de unaciudad, regi n o naci n cambiar n con el transcurso deltiempo. La presencia de una red bien desarrollada de fun-ciones y servicios esenciales de salud p blica permite laflexibilidad y el crecimiento de la programaci n con elcorrer de los a tema de las funciones esenciales ha recibido aten-ci n en muchos pa ses pero solo de manera individual. Anivel internacional, la Organizaci n Mundial de la Salud1(OMS) y la Organizaci n Panamericana de la salud (OPS)han encabezado actividades conjuntas para facilitar lacooperaci n y el aprendizaje mutuo. Aunque gran partedel trabajo realizado ha sido gen rico para todo el mbitode la salud p blica, tambi n se han emprendido inicia-tivas para determinar los aportes de profesiones indivi-duales relacionadas con la salud a la actividad general. Porejemplo, las enfermeras salubristas en los Estados Unidoshan logrado especificar en qu forma un mejor ejerciciode la salud p blica dentro de la disciplina puede fortalecerla infraestructura de salud p blica de una comunidad onaci enfermeras que est n contribuyendo a defi-nir las funciones esenciales no piensan en realidad que lohacen, ya que est n poco familiarizadas con el nuevo len-guaje de la salud p blica.

3 Un mayor n mero de enfermeraspodr an convertirse en colaboradores activos de la empresade salud p blica si vieran m s claramente c mo la pr cticade la enfermer a forma parte integral del proceso. El grupode enfermeras que trabaja tanto en enfermer a de saludp blica como en funciones esenciales , cree que, si biengran parte de la formaci n de la fuerza de trabajo re-lacionada con las funciones esenciales de salud p blicadeber a hacerse con grupos interdisciplinarios, se justi-fica prestar especial atenci n a la enfermer a ya que estaprofesi n cumple funciones claves en materia de saludp blica en las Am ricas. Tambi n consideran que las en-fermeras necesitan cierta formaci n profesional concretay las herramientas que las preparen para el ejercicioprofesional interdisciplinario, especialmente porque mu-chas de ellas no han estudiado a nivel de bachillerato osuperior.

4 Para fines de este an lisis, se considerar prin-cipalmente como enfermeras salubristas a las que hanrealizado estudios de enfermer a superiores al nivel desecundaria, que trabajan en un programa o actividaddestinado a la poblaci n en un organismo de salud p blicaLa enfermer a de salud p blica y las funcionesesenciales de salud p blica: bases para elejercicio profesionalPrograma de Organizaci n y Gesti n de Sistemas y Servicios de salud (HSO), Divisi n de Desarrollo de Sistemas y Servicios de salud (HSP),Organizaci n Panamericana de la salud , Organizaci n Mundial de la SaludRev Enferm IMSS 2004; 12(3): 159-170160oficial o en una entidad contratada porel gobierno. Hay algunas enfermerasque ejercen en otras organizaciones(organizaciones voluntarias de salud ,programas no gubernamentales o siste-mas de servicios de salud ) y que tal vezest n trabajando en el mbito de lasalud p blica, pero en esta oportunidadno se incluyen en este an el presente documento se exa-mina la teor a actual sobre las funcio-nes esenciales de salud p blica y lascontribuciones particulares de las en-fermeras salubristas a estos serviciosen los Estados Miembros de la OPS,basados en la revisi n de la bibliogra-f a disponible, los modelos publicadosy los estudios de casos referentes altrabajo de enfermer a de salud p blicaen dichos pa ses.

5 Adem s de describirlo que sucede actualmente, se presen-tan esferas para la investigaci n y de -sarrollo futuros. Estas esferas incluyencambios potenciales en el ejercicio dela profesi n, as como formas en que lasenfermeras de los Estados Miembrosde la OPS pueden mejorar la educa-ci n de enfermer a en materia del ejer-cicio de la salud p blica y sus funcionesesenciales, adem s de prestar apoyocontinuo al mejoramiento hist ricoAunque por separado, las diversas acti-vidades de salud p blica tienen unalarga historia. La organizaci n de losdepartamentos de salud por jurisdic-ciones gubernamentales (ciudades, con-dados, distritos, naciones) empez realmente en el siglo XIX y se centra-ba inicialmente en el saneamiento. Alcomienzo, se prest atenci n sobretodo al abastecimiento de agua pota-ble limpia y a la eliminaci n inocua dedesechos humanos y de otro tipo, enparticular en los medios urbanos.

6 Segui-damente, se emprendieron iniciativaspara el control de las enfermedadestransmisibles por otros medios, tal comola tuberculosis. A medida que se haavanzado en el conocimiento de los fac-tores determinantes de la salud y de lascausas de enfermedad, se han amplia-do los esfuerzos en materia de saludp El inter s en el desarrollo deni os sanos se ha traducido en programasde nutrici n materno infantil, as como enprogramas de vacunaci n y de seguridaddel ni o. Los programas de seguridad ysalud ocupacional se han introducido enuna amplia gama de lugares de las esferas que recientemente hansuscitado inter s se encuentran: preven-ci n del c ncer asociado con consumodel tabaco, promoci n de la salud men-tal y reducci n de la violencia y elsuicidio. La prestaci n de servicios cl ni-cos a quienes padecen enfermedadesconcretas tiene mayores probabilidadesde asociarse con la salud p blica cuandohay pocos servicios de atenci n m di-ca personal en la comunidad.

7 La saludp blica tambi n colabora activamenteen caso de desastres naturales o causa-dos por el hombre y vela para que laexposici n al riesgo sea limitada y paraque los servicios b sicos de salud p bli-ca se restauren lo m s r pido diversos tipos de organis-mos oficiales, grupos voluntarios yorganizaciones privadas que partici-pan en cierto grado en la salud p mayor a de las comunidades se be-nefician del inter s y la participaci n delos ciudadanos en la promoci n de supropia salud mediante la educaci n yel cambio de comportamientos. Hastalos programas normativos tradiciona-les se benefician de la colaboraci nvoluntaria de asociaciones que repre-sentan a los que deber n acatar lasnormas. Este documento se centra prin-cipalmente en los organismos guber-namentales que son responsables de lasalud de las personas de una comuni-dad, y principalmente en las enfer-meras empleadas directamente ocontratadas por esos actividad de salud p blica, al igualque cualquier otra actividad, est in-fluenciada por la forma en que se perci-be el mundo.

8 La forma de pensar de untrabajador de salud p blica hace quesu trabajo est destinado principal-mente a grupos o a poblaciones y no aindividuos. Por ejemplo, un m dico ouna enfermera dedicados a la saludp blica enfocan la planificaci n de lavacunaci n haci ndose la pregunta qu proporci n de la gente de este pueblo(o pa s o vecindario) est vacunada? eidentifica los vecindarios o los subgruposcon tasas bajas de vacunaci n antes decomenzar a preguntar a los ni os, unopor uno ya te vacunaron? Esto contras-ta con el cl nico, cuya reflexi n empiezacuando las personas se presentan asolicitar atenci n m dica. Los profesio-nales de salud p blica se preocupaninfinitamente de que las personas reci-ban la atenci n b sica de salud y laatenci n de urgencia que la atenci n se centra en el estable-cimiento de sistemas donde las perso-nas puedan estar sanas: agua potableinocua, eliminaci n sin riesgos de losdesechos de todo tipo, suministro dealimentos inocuos y nutritivos, luga-res de trabajo seguros, educaci n sa-nitaria como parte de la educaci nb sica, etc.

9 Independientemente dela organizaci n de los servicios rela-cionados con la salud en un pa s y dela formaci n recibida por m dicos,enfermeras y otros profesionales afi-nes, a menudo las l neas divisoriasentre la salud p blica y la atenci nindividual se tornan borrosas a ilustrar las diferencias entre lasalud p blica y los otros aspectos detodo el sistema de servicios de saludsuele usarse una pir mide (figura 1).La pir mide central incluye: Prevenci n primaria, o medidas to-madas para prevenir la aparici nde enfermedades. Prevenci n secundaria, o medidastomadas para detectar la enfer-medad tempranamente y ofrecer lacura definitiva. Prevenci n terciaria, o medidas to-madas para tratar la enfermedaden curso y limitar sus efectos en , HSP, OPS, OMS: funciones esenciales de enfermer a en salud p blicaSi bien todos estos servicios son impor-tantes para quienes los reciben, los ser-vicios m s cercanos a la base de lapir mide tienen una mayor repercusi nsobre un mayor n mero de personas ydurante un per odo m s largo que losservicios a nivel secundario o terciario.

10 Elestrato denominado "servicios cl nicosde prevenci n" se sit a entre el nivelprimario y el secundario de prevenci n,o se superpone a la l nea que separaestos dos niveles. Este nivel de serviciosabarca las medidas destinadas a preve-nir las enfermedades (por ejemplo, va-cunaci n) y a las que procuran lograr ladetecci n temprana (por ejemplo, tami-zado de la presi n arterial o ex menesde la vista). Estos servicios podr an orga-nizarse como servicios dirigidos a lapoblaci n, tales como jornadas de vacu-naci n a nivel nacional, o incorporarlos ala atenci n m dica primaria pir mide de la izquierda es unapir mide de servicios opcionales desalud que abarca lo siguiente: Atenci n primaria, equivalente a laparte b sica de la prevenci n secun-daria. Atenci n secundaria, que incluyelas partes m s complejas de la pre-venci n secundaria.


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