La Escala de Inteligencia de Binet y Simon (1905) su ...

1 307La Escala de Inteligencia de Binet y Simon (1905) su recepci n por la Psicolog a posteriorLa Escala de Inteligencia de Binet y Simon (1905) su recepci n por la Psicolog a posteriorJuan Antonio Mora M ridaMiguel Luis Mart n JorgeUniversidad de M lagaRevista de Historia de la Psicolog a, vol. 28, n m. 2/3, 2007 307-313 Resumen Con la publicaci n de la Escala de Inteligencia de Binet y Simon (1905) se inicia una fruct fera tradici n en el mbito de la Psicolog a aplicada. Llevada a los Estados Unidos por Goddard (1908, 1910), la Escala tuvo un gran impacto social, especialmente a partir de la revisi n de Terman (1916). Despu s de varias versiones, en el a o 2003 aparecer a la quinta edici n, ltima hasta el momento. Una refl exi n sobre los materiales inclusos en las mismas, nos permite apreciar los cambios paradigm ticos e ideol gicos que se refl ejan en las sucesivas versiones.

2 Ante esto, nos planteamos hasta qu punto el proyecto originario de Binet se ha mantenido a trav s de todas clave: Escala de Inteligencia , retraso mental, experimentalismo, adaptaci n social, ortopedia mental, CI, edad With the publication of the Binet and Simon Intelligence Scale (1905) begins a fruitful tradition in the realm of applied Psychology. Brought into United States by Goddard (1908, 1910), the scale had a great social impact, especially after Terman s revision (1916). After several versions, in 2003 appeared the fi fth edition, the last one until the present day. A refl ection on the materials included in them, enables us to appreciate the paradigmatic and ideological changes refl ected in the successive versions.

3 In view of this, we consider to what extend the Binet s original project remains through all of : Intelligence scale, mental retardation, experimentalism, social adaptation, mental orthopedics, IQ, mental Antonio Mora M rida / Miguel Luis Mart n JorgeINTRODUCCI NHacia fi nales del siglo XIX se perfi lan ya dos corrientes enfrentadas en el estudio de la Inteligencia y en su medida. La primera, iniciada por Galton (1822-1911), se caracteriza por una concepci n de la capacidad intelectual basada en procesos mentales y sensoriales simples. Infl uido por la tradici n asociacionista y por los avances de la fi siolog a sensorial, Galton (1869) elabor diversas pruebas para estimar toda clase de par metros psicof sicos (umbrales de per-cepci n, tiempo de reacci n, agudeza visual, capacidad respiratoria, etc.)

4 , a partir de los cuales pretend a obtener una medida objetiva de la Inteligencia . En contraste con esta metodolog a y con los presupuestos te ricos que subyac an a ella, Binet (1857-1911) desarroll una concepci n de la Inteligencia m s centrada en sus productos que en sus constituyentes b sicos. Frente a la simplicidad de las pruebas utilizadas por Galton, las escalas de Inteligencia de Binet y Simon (1905, 1908) y Binet (1911) se caracterizan por incluir pruebas m s complejas, destinadas a explorar procesos mentales de orden superior, tales como la memoria, las im genes mentales, la comprensi n o el la formaci n intelectual y en la trayectoria profesional de Alfred Binet se puede apreciar la diversidad de intereses, el eclecticismo y la naturaleza heterog nea de esta fi gura.

5 Se licenci en Derecho en 1878; inici estudios de Medicina que nunca concluy ; ley las obras de los principales psic logos en la Biblioteca Nacional de Par s; en 1882 comenz a trabajar con Charcot en el Hospital de la Salp tri re; en 1891 inici su colaboraci n en la Sorbona como ayudante de laboratorio de Beaunis, a quien m s tarde suceder a en la direcci n; en 1895 fund la revista l Ann e Psychologique; defendi su tesis doctoral sobre el Sistema Nervio-so Sub-intestinal de los Insectos ( Binet , 1894); adem s de su conocida Escala de la Inteligencia ( Binet y Simon , 1905, 1908; Binet , 1911), public numerosos libros y art culos sobre temas tan variados como el testimonio legal ( Binet , 1900), la grafolog a ( Binet , 1906) o el fetichismo (1887); tambi n escribi obras de teatro, algunas de las cuales fueron representadas en Par s ( Binet y Lorde, 1909, 1913).

6 Incansable trabajador y autodidacta, Binet nunca alcanz un status acad mico acorde con sus aportaciones a la Psicolog a. A lo largo de su vida, intent sin xito en varias ocasiones lograr una posici n docente. Sinti ndose injustamente tratado por la comunidad psicol gica, intensifi c sus relaciones con los pedagogos, encauzando su actividad hacia el mbito aplicado de la psicolog a CONSTRUCCI N DE LA Escala M TRICA DE LA Inteligencia DE ALFRED BINETE ntre 1899 y 1900 Binet ingres en la Soci t Libre pour l tude Psychologique de l Enfant, organizaci n de la que ser a nombrado su presidente dos a os despu s. Esta instituci n fue fundada por Ferdinand Buisson (1841-1932), profesor de Ciencias de la Educaci n en la Sorbona, republicano y socialista radical.

7 La Sociedad, que a n existe actualmente, contaba entre sus objetivos b sicos el sensibilizar a las autoridades sobre la problem tica asociada a la escolarizaci n de los ni os con retraso mental. 309La Escala de Inteligencia de Binet y Simon (1905) su recepci n por la Psicolog a posteriorEn 1904 el ministro franc s de Instrucci n P blica, Joseph Chaumi (1849-1919), cre una comisi n interministerial para analizar la situaci n en los centros escolares. El momento hist rico en el que tiene lugar esta iniciativa es la consolidaci n de la Tercera Rep blica y la ascendencia al poder de la izquierda radical. La pol tica educativa de este per odo se caracteriza por una progresiva secularizaci n de las instituciones, la aplicaci n del conocimiento cient fi co a la pr ctica escolar y la doctrina de la solidaridad de L on Bourgeois (1851-1925) (Foschi y Cicciola, 2006).

8 Aunque relativamente ajeno al mundo de la pol tica, Binet encontr este marco muy favorable para llevar a la pr ctica sus proyectos. Un paso decisivo en este sentido fue formar parte de la comisi n de 1904, presidida por el propio Bourgeois y cuya fi nalidad era fi jar las condiciones de escolarizaci n para los alumnos con defi ciencia mental. La idea era establecer unas clases especializadas para los ni os de entre seis y diecis is a os con este tipo de d fi cit. Esto planteaba la necesidad de idear un sistema diagn stico para discriminar entre los ni os normales y aquellos que padec an un cierto grado de retraso intelectual. A Binet se le enco-mend esta tarea, de la cual resultar a la primera prueba de Inteligencia ( Binet y Simon , 1905), llamada pomposamente test acuerdo con sus intereses y actividad profesional e investigadora, Binet se sit a en la tradici n naturalista y cientifi cista de la Psicolog a francesa de fi n de si cle, que se inicia con los trabajos de Hippolyte Taine (1828-1893) y Th odule Ribot (1839-1916).

9 En el enfoque de Binet convergen diferentes modalidades de experimentalismo: de laboratorio, cl nico, psico-m trico y evolutivo. Sobre esta base metodol gica, en colaboraci n con el m dico Theodore Simon (1873-1961), elabor su primera versi n de la Escala de Medida de la Inteligencia ( Binet y Simon , 1905). El test consist a en treinta elementos que eran puntuados como acierto o error. En l, se combinaban pruebas sensoriomotrices (coordinaci n visual, motora, etc.) con otras, en mayor n mero, de car cter cognoscitivo (memoria, discriminaci n de informaci n, pensamiento divergente, etc.). La correcta resoluci n de muchas de las tareas requer a la coordinaci n de habilidades f sicas e intelectuales. En contraste con el tipo de pruebas empleadas por Galton, la mayor complejidad de los tems supuso un avance substancial en la evaluaci n de la Inteligencia dentro del contexto cl nico.

10 La Escala estaba destinada a ni os de entre tres y doce a os. Los elementos se encontraban dispuestos en orden ascendente de difi cultad, acompa ndose de cuidadosas instrucciones para su aplicaci n. Algunos han sugerido que la Escala de 1905 m s que un test de Inteligencia era una prueba de falta de Inteligencia (Gondra, 1997), puesto que 27 de los 30 tems que la compon an estaban pensados para los benefi ciarios de la educaci n especial. S lo aquellos que lograban superar las tres ltimas pruebas (relacionadas con el razonamiento y la capacidad de abstracci n) se consideraban dentro del rango de la trav s de su aplicaci n, los autores comprobaron c mo los primeros elementos resul-taban demasiado sencillos para la mayor a de los ni os, mientras que los ltimos entra aban serias difi cultades, incluso para muchos de los mayores.