Tratamiento y prevención de la neumonía

1 63. ASAMBLEA mundial DE LA SALUD A63/26. Punto del orden del d a provisional 25 de marzo de 2010. Tratamiento y prevenci n de la neumon a Informe de la Secretar a Carga y epidemiolog a de la neumon a 1. El Objetivo de Desarrollo del Milenio 4 (Reducir la mortalidad infantil) s lo puede alcanzarse si se intensifican los esfuerzos por reducir las principales causas de mortalidad entre los ni os menores de cinco a os: neumon a, diarrea, paludismo, malnutrici n y problemas neonatales. De esas afecciones, la neumon a sigue siendo responsable del mayor n mero de muertes entre los menores de cinco a os en todo el mundo; a ella se debieron 1,8 millones de la cifra estimada de 9 millones de muertes de menores de cinco a os que se produjeron en todo el mundo durante 2.

2 Se calcula que la incidencia de la neumon a entre los menores de cinco a os es del orden de 0,29 casos por ni o y a o en los pa ses en desarrollo y de 0,05 casos por ni o y a o en los desarro- llados. Estas cifras se traducen en alrededor de 156 millones de nuevos casos anuales en todo el mundo, de los que 151 millones se producen en los pa ses en desarrollo. 3. La mortalidad por neumon a en la infancia est fuertemente vinculada a la malnutrici n, la po- breza y la falta de acceso a la atenci n sanitaria. En consecuencia, m s del 98% de las muertes por neumon a entre los ni os tiene lugar en los pa ses en desarrollo, la mayor parte de ellas en comunida- des marginadas. A su vez, la carga que la neumon a supone para las familias y el sistema de salud en los pa ses de recursos limitados agrava las desigualdades ya existentes.

3 La tasa de cobertura de las intervenciones es considerablemente m s baja entre los miembros m s pobres de la sociedad y m s elevada entre los m s acomodados. 4. Las infecciones bacterianas contribuyen de manera desproporcionada a la mortalidad por neumo- n a en los pa ses en desarrollo. A pesar de que no suponen m s del 50% de los casos de neumon a, pro- vocan casi el 70% de los fallecimientos debidos a esa enfermedad. Las infecciones mixtas por bacterias y virus guardan relaci n con la elevada mortalidad. El Streptococcus pneumoniae y el Haemophilus influenzae son las bacterias que m s casos de neumon a causan: a esos dos organismos se deben m s de la mitad de todas las muertes por neumon a en los menores de cinco a os. El virus sincitial respira- torio es el virus que m s casos de neumon a causa, en particular entre los lactantes, seguido por los vi- rus gripales.

4 1. OMS. Estad sticas Sanitarias Mundiales 2009. Ginebra, Organizaci n mundial de la Salud, 2009. En esta cifra no se incluyen las defunciones por neumon a ocurridas en el periodo neonatal y las relacionadas con el sarampi n, la tos ferina y la infecci n por VIH. A63/26. Estrategias eficaces de prevenci n y control de la neumon a 5. Durante los ltimos 20 a os se han venido acumulando datos sobre la eficacia de las interven- ciones encaminadas a prevenir y controlar la neumon a. Se ha demostrado que las siguientes interven- ciones consiguen resultados satisfactorios en la reducci n de la mortalidad por esa infecci n: la vacunaci n, incluido el uso de vacunas contra la infecci n por Streptococcus pneumoniae y Haemophilus influenzae de tipo b.

5 El manejo de los casos de neumon a en la comunidad, los centros de salud y los hospitales;. la lactancia materna exclusiva durante los seis primeros meses de vida;. la mejora de la nutrici n y la prevenci n de la insuficiencia ponderal del reci n nacido;. el control de la contaminaci n del aire en interiores y el logro de un medio ambiente saludable;. la prevenci n y Tratamiento de la infecci n por VIH. 6. La eficacia de estas intervenciones ha quedado demostrada. La vacunaci n contra las infeccio- nes por Streptococcus pneumoniae y Haemophilus influenzae de tipo b (Hib) ha reducido la incidencia de la neumon a en distintos lugares en alrededor del 30% (entre el 20% y el 37%) y del 20% (entre el 12% y el 55%), respectivamente. Gracias a la introducci n de la vacuna antineumoc cica en los Esta- dos Unidos de Am rica, las hospitalizaciones infantiles por neumon a se redujeron en un 39%.

6 El ma- yor acceso a la atenci n de salud que supone el manejo de casos basado en la comunidad ha llevado a una reducci n de la mortalidad total del 27%, el 20% y el 24% entre los reci n nacidos, los lactantes y los ni os, respectivamente, mientras que la mortalidad por neumon a tambi n se ha reducido, en esos mismos grupos, en un 42%, un 36% y un 36%. La promoci n de la lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida y de una alimentaci n complementaria adecuada entre los 6 y los 23 me- ses ha causado una reducci n del n mero total de ni os fallecidos del 13% y el 6%, respectivamente. 7. La costoeficacia de las vacunas antineumoc cica y contra el Haemophilus influenzae de tipo b depende de la carga de morbilidad y del precio de las vacunas en el pa s de que se trate.

7 Los datos provenientes de los pa ses de ingresos bajos con una gran carga de morbilidad revelan que, con los precios actuales del UNICEF para la vacuna contra el Haemophilus influenzae de tipo b, el costo por a o de vida ajustado en funci n de la discapacidad evitado ascender a a US$ 38-US$ 74. En lo relati- vo a la vacuna antineumoc cica conjugada, a un precio previsto por dosis de US$ 5 (el precio actual en el marco del compromiso anticipado de mercado ser , seg n lo previsto, de US$ 3,50 por dosis para los pa ses que re nen los requisitos para recibir ayuda de la alianza mundial para Vacunas e Inmunizaci n), el costo por a o de vida ajustado en funci n de la discapacidad evitado ascender a a US$ 100. Con arreglo a los criterios establecidos por la OMS, esas dos vacunas se considerar an muy costoeficaces en entornos donde la carga de morbilidad es elevada.

8 La costoeficacia del manejo de casos tambi n depende de la carga de morbilidad y del costo de la atenci n y el Tratamiento en los establecimientos de atenci n de salud del pa s de que se trate. En 40 pa ses de las distintas regiones de la OMS, subdivididos en funci n de la mortalidad de ni os y adultos, la costoeficacia del manejo de los casos de neumon a en establecimientos de salud comunitarios oscila entre US$ 21 y US$ 343, mientras que en establecimientos de nivel secundario y terciario es de entre US$ 62 y US$ 1011 por cada a o de vida ajustado en funci n de la discapacidad evitado. 2. A63/26. Dificultades de la ejecuci n 8. La mayor parte de las muertes de menores de cinco a os por neumon a se evitar a si las inter- venciones eficaces se aplicaran en gran escala y llegasen a las poblaciones m s vulnerables.

9 Es fun- damental que los cuidadores conozcan y reconozcan los signos de peligro de neumon a en los ni os y que el diagn stico y el Tratamiento con antibi ticos apropiados de los ni os que presenten esos signos corra a cargo de personal de salud capacitado. Seg n se ha informado, actualmente en los pa ses en desarrollo s lo el 54% de los ni os con neumon a son atendidos por un proveedor de asistencia sanita- ria A pesar del papel fundamental que juegan los antibi ticos en la reducci n del n mero de muertes infantiles por neumon a, s lo el 19% de los menores de cinco a os con signos cl nicos de la infecci n reciben ese tipo de medicamento. Hasta la fecha, pocos pa ses han incluido una vacuna antineumoc cica conjugada en sus programas nacionales de inmunizaci n.

10 S lo el 34,8% de las ma- dres practican la lactancia materna exclusiva hasta los seis Tambi n predomina una baja co- bertura en lo que respecta a otras intervenciones y, cuando la cobertura es escasa, generalmente son los ni os m s expuestos a la neumon a los que quedan desatendidos. 9. Una dificultad especial plantea el crear sinergias entre los programas y los departamentos inte- resados dentro de los ministerios de salud y entre las otras instituciones que suministran servicios de salud o ejecutan intervenciones complementarias. Es necesario intervenir con urgencia y, para garan- tizar que exista un entorno debidamente receptivo a las intervenciones y se disponga de recursos sufi- cientes, las intervenciones contra la neumon a deben recibir prioridad tanto en el plano normativo como financiero.