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Valores morales y axiología. El fi n y los medios

S117 Volumen 33, Supl. 2 Abril-Junio General Vol. 33 Supl. 2 - 2011 Facultad de Medicina, Universidad Aut noma de Quer taro. Correspondencia: Dr. C sar Guti rrez de Medicina, UAQ, Clavel 200, Col. La taro, Qro. 76170 Tel 442 192 1200 Ext. 6221 y : art culo puede ser consultado en versi n completa en: morales y axiolog a. El fi n y los mediosC sar Guti rrez Samperio, Ma. Guadalupe del Roc o Guerrero Lara, Trinidad L pez V zquezLa cirug a, sea cual sea su extensi n y el campo espe-c fi co de acci n constituye un trauma, es una agresi n al enfermo en las esferas bio psico social, lo que es indispensable tomar en cuenta para su manejo integral. Es un trauma necesario en benefi cio del paciente, el que se utiliza con el fi n de ayudarlo para controlar sus s nto-mas, con menor frecuencia para curar su enfermedad y en ocasiones para prolongar su cirug a es un trauma que produce dolor de intensi-dad y duraci n variable, que puede dar lugar a complica-ciones m s o menos severas, que a su vez aumentan la morbilidad y mortalidad, o bien deja secuelas a mediano o largo plazo, tolerables en al algunos casos, incapacitan-tes en otros, todo lo anterior tiene repercusi n laboral y representa un costo econ mico, elementos que se deben tener en cuenta, para que el m dico tratante y el cirujano se formen un juicio y tomen la decisi n m s ,2El incremento exponencial de los conocimientos cien-t fi cos, al que la cirug a no es aj

Volumen 33, Supl. 2 Abril-Junio 2011 S119 Valores morales www.medigraphic.org.mx y mejorar sus destrezas, capacitarse en el campo de acción donde trabaja.

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1 S117 Volumen 33, Supl. 2 Abril-Junio General Vol. 33 Supl. 2 - 2011 Facultad de Medicina, Universidad Aut noma de Quer taro. Correspondencia: Dr. C sar Guti rrez de Medicina, UAQ, Clavel 200, Col. La taro, Qro. 76170 Tel 442 192 1200 Ext. 6221 y : art culo puede ser consultado en versi n completa en: morales y axiolog a. El fi n y los mediosC sar Guti rrez Samperio, Ma. Guadalupe del Roc o Guerrero Lara, Trinidad L pez V zquezLa cirug a, sea cual sea su extensi n y el campo espe-c fi co de acci n constituye un trauma, es una agresi n al enfermo en las esferas bio psico social, lo que es indispensable tomar en cuenta para su manejo integral. Es un trauma necesario en benefi cio del paciente, el que se utiliza con el fi n de ayudarlo para controlar sus s nto-mas, con menor frecuencia para curar su enfermedad y en ocasiones para prolongar su cirug a es un trauma que produce dolor de intensi-dad y duraci n variable, que puede dar lugar a complica-ciones m s o menos severas, que a su vez aumentan la morbilidad y mortalidad, o bien deja secuelas a mediano o largo plazo, tolerables en al algunos casos, incapacitan-tes en otros, todo lo anterior tiene repercusi n laboral y representa un costo econ mico, elementos que se deben tener en cuenta, para que el m dico tratante y el cirujano se formen un juicio y tomen la decisi n m s ,2El incremento exponencial de los conocimientos cien-t fi cos, al que la cirug a no es ajena, el r pido y muchas veces espectacular desarrollo de la tecnolog a, han dado lugar a problemas que no se contemplaban hasta hace pocos a os.

2 A preguntas dif ciles de contestar y muchas de ellas a n sin respuesta. En qu enfermos deben aplicarse estos avances, qu pacientes realmente se benefi ciar n con ellos, en qu momento usarlos, pero tambi n cu ndo y en qu pacientes no usarlos, todo ello siempre en benefi cio de los acepta y as aparece en diversos documentos m dicos, jur dicos, sociales y de otra ndole, que el m -dico debe actuar apegado a la Lex Artis o sea ejercer su profesi n, de acuerdo con los avances cient fi cos y tecnol gicos, con apego a la ley y la tica. Lo que le da un doble enfoque, uno meramente cient fi co que fundamenta el uso racional de los conocimientos y la tecnolog a, y otro humanista, que implica normatividad jur dica, social y ,5 Con frecuencia se confunden los conceptos de Moral (Mor moris costumbre) con el de tica (Ethos-costumbre) o se usan indistintamente. Moral es la prescripci n de un conjunto de normas de conducta, religiosas o laicas, que los integrantes de un conglomerado social deben seguir.

3 Tica es la refl exi n sobre estas normas de conducta, para rechazarlas o aceptarlas, haci ndolas suyas, por lo que se dice que La tica es la fi losof a de la moral .6La regulaci n de la cirug a por la ley, por un conjunto de normas de conducta de los integrantes de un grupo social, as como por la tica, que es la refl exi n fi los -fi ca de estas normas de conducta de acuerdo con los Valores morales , nos llevar a actuar con rectitud, con uno mismo y con los dem s integrantes de la sociedad. Esta regulaci n condiciona que el ejercicio quir rgico sea adecuado a las necesidades del enfermo, con respeto de sus derechos, la equidad, la autonom a y dignidad que tiene todo ser , 8La tica es inherente a las actividades de todas las personas independientemente de cual sea su actividad, orienta para actuar con rectitud, hacer el bien, evitar el mal, con apego a la verdad y la justicia, permea las acciones de los integrantes del equipo de salud dentro y fuera de su sitio de trabajo: el hospital, el quir fano o el consultorio, pero tambi n en la calle, el sitio de esparci-miento, la escuela o el seno de la familia, mientras que la bio tica se relaciona con el comportamiento tico en relaci n con los seres ,4La bio tica es un t rmino reciente, acu ado por un onc logo de Wisconsin, Von Raesecael Potter, quien en 1971 la defi ni como Disciplina encargada de regular a los seres vivos.

4 Vegetales, animales y el hombre, as c omo al medio ambiente . Para su aplic aci n en el mbito de la medicina y la cirug a esta defi nici n se complemen-ta con la de Daniel Callahan Disciplina encargada de regular los avances cient fi cos y tecnol gicos para que no se vuelvan contra el hombre en otras palabras, la bio tica es una disciplina laica y eminentemente pr cti-ca, encargada de regular las innovaciones cient fi cas y tecnol gicas en relaci n a los seres ,9El quehacer diario de acuerdo con la corriente fi los fi ca deontol gica de la bio tica, los principios de la bio tica: benefi cencia, no malefi cencia, autonom a y justicia, de acuerdo con la corriente principialista. las normas de con-ducta de la corriente personalista: autonom a, confi dencia-lidad, privacidad, veracidad, equidad, lealtad y fi delidad se fundamentan en Valores morales , los que a su vez son el fundamento de la corriente utilitarista o pragm tica, si se Guti rrezS118 Cirujano en cuenta para qui n es el benefi cio, para la institu-ci n, para el m dico y principalmente para el ,11 Cuando utilizamos el t rmino Moral no se hace con un enfoque religioso, se hace un enfoque tico, consi-derando que las normas de conducta se relacionan con las personas, sea cual sea su religi n, como tambi n se relacionan con las personas que se dicen agn sticos o ateos.

5 De tal manera que el vocablo moral se ha conver-tido en adjetivo, que califi ca a otro vocablo, as hablamos de conducta moral, hechos morales y Valores morales , de los que nos ocuparemos en las siguientes l Valores moralesEn la vida diaria, en diferentes conglomerados sociales, en el medio acad mico m dico constantemente se habla de los Valores morales , tema de vital importancia para una buena pr ctica m dica y quir rgica, ya que constituyen la base de los principios y normas ticas, al igual que de muchas leyes en el rea de la salud, sin embargo, se ma-nejan en forma discrecional por la sociedad, los enfermos y sobre todo por los medios masivos de comunicaci n, por lo que es necesario aclarar su defi nici n, su verdadero signifi cado y repercusi n en las esferas legal y es la importancia que tiene una cosa o acci n para una persona, este valor puede ser material, eco-n mico, social o pol tico, tambi n puede ser la decisi n, arrojo o valent a para llevar a cabo una empresa, cuyo extremo ser a la intrepidez y en el polo opuesto ser a la indiferencia o cobard a, al respecto los extremos siempre son perjudiciales y deben evitarse.

6 Cuando la palabra moral califi ca al vocablo valor cambia la connotaci n, se constituye el Valor moral que lleva impl cito la evalua-ci n, juicio y caracterizaci n de una acci n, orientada a hacer el bien y evitar el ,12 Para identifi car a los Valores morales debemos tomar en cuenta sus caracter sticas: son trascendentes, no en el sentido metaf sico, sino en el sentido tico en cuanto a su repercusi n en otras personas y la sociedad; tienen polaridad, existe su contrario, valor negativo o antivalor; son personales o propios de cada persona; tienen pre-feribilidad, por lo que cada persona los elije de acuerdo con la importancia que les da, su ideolog a y el contexto donde se desenvuelve; en cambio, no se les puede dar una equivalencia num rica, no son cuantifi cables. Con los ejemplos consignados a continuaci n se pueden comprender mejor estos conceptos, lo que facilita su manejo en situaciones concretas 12,13. Valor moral Anti valorBien, benefi cencia Mal, malefi cenciaLibertad, autonom a Esclavitud, sumisi nJusticia, equidad Injusticia, inequidadHonestidad, decoro Deshonestidad, impudiciaHonradez, integridad Deshonra, corrupci nConstancia, tes n Flaqueza, apat aValor, valent a Cobard a, miedoHumildad, modestia Soberbia, orgulloVerdad, veracidad Mentira, enga oEl bien constituye la esencia misma de la tica y la bio tica, la benefi cencia en todo acto m dico orientada siempre a favor de los intereses del enfermo, el mayor bien para el mayor n mero de personas.

7 De mucha im-portancia es el evitar el valor negativo o antivalor, evitar el mal, no hacer da o, mencionado hace 25 siglos en los escritos hipocr ticos, con la frase Primun non nocere , primero es no da ar .3,13La libertad se relaciona con la autonom a del paciente para elegir al m dico tratante, para aceptar o no determi-nado procedimiento diagn stico o terap utico, lo que de-bidamente informado y comprendido por el paciente, en cuanto a los benefi cios, riesgos, posibles complicaciones y alternativas, constituye el Consentimiento informado documento que cada vez cobra mayor importancia, des-de el punto de vista legal y tico. La autonom a tambi n se refi ere al m dico, al aceptar o rechazar de acuerdo con sus principios ticos tratar a determinado enfermo, realizar o no un procedimiento diagn stico o terap utico espec fi co, La autonom a es la base del modelo de rela-ci n m dico-paciente con responsabilidad compartida, evitando el paternalismo y la sumisi ,15L a justicia en cuanto a la equitativa distribuci n de los recursos materiales, econ micos, materiales y humanos, para una adecuada atenci n de la salud, reviste mucha importancia en los jefes de servicio o directivos, quienes son los responsables de proporcionar lo necesario para el adecuado ejercicio de la profesi n, c on equilibrio entre lo asignado para las actividades asistenciales, docentes y de investigaci n, del pago por el trabajo de acuerdo con la carga de trabajo y difi cultades t cnicas, con equitativo acceso a los incentivos de diferente ndole.

8 As como a las oportunidades de capacitaci n y superaci honestidad para reconocer la propia capacidad y los errores, para solicitar ayuda cuando el caso lo requiere, en estrecha relaci n con la honradez para el uso adecuado de los recursos y equipo m dico bajo su responsabilidad, son propios de cada persona, mucho dependen de sus principios morales y ticos, del medio social y laboral donde se desenvuelve, de la formaci n profesional del cirujano, durante la cual aprende qu hacer y qu no hacer, para tratar de realizar lo adecuado de la mejor manera ,17Es importante que el m dico tenga constancia en todas sus actividades, tes n en la atenci n de sus enfermos, siempre dispuesto a vencer las difi cultades que se presenten, sin caer en la indiferencia o la apat a. Fortaleza de car cter indispensable para todo cirujano, con los debidos l mites de su propia capacidad para no realizar actividades en las que no est preparado, la audacia en la cirug a puede perjudicar al enfermo.

9 Debe tener valor para emprender empresas dif ciles, para su-perar retos, pero con la prudencia que se requiere para cuidar al enfermo, sin llegar a la cobard a o miedo que lo hace pusil ,19Es necesario que el cirujano recupere la humildad para reconocer su propia capacidad, que sea honesto para solicitar ayuda a compa eros con mayor prepa-raci n y experiencia, con la modestia necesaria para aceptar que necesita incrementar sus conocimientos S119 Volumen 33, Supl. 2 Abril-Junio 2011 Valores mejorar sus destrezas, capacitarse en el campo de acci n donde trabaja. La soberbia y el orgullo con frecuencia le impiden reconocer sus errores, detectar oportunamente las complicaciones y solicitar la ayuda profesional o institucional que se requiere, es la causa de la mala evoluci n de algunos enfermos, en los que se solicita apoyo demasiado tarde, dice un viejo adagio Los cirujanos llevamos un cementerio en el coraz n, que debemos visitar de vez en cuando para recuperar un poco de humildad.

10 2,19El apego a la verdad es indispensable para estable-cer una buena relaci n m dico-paciente, proporcionar al enfermo la informaci n adecuada en cuanto a los procedimientos diagn sticos que se necesitan, las in-dicaciones terap uticas con sus riesgos, benefi cios y otras posibles alternativas, es un componente ineludible del consentimiento informado, en la verdad se cifra la confi anza del enfermo, de la que depende una buena relaci n m dico-paciente, debe prevalecer con todos los enfermos, aun en situaciones dif ciles, como son los enfermos con c ncer o terminales. Por otra parte la veracidad es indispensable en la investigaci n m dica, el apego al protocolo, informe de los resultados y publi-caci n de los ,20,21 Axiolog aLos diferentes Valores morales no tienen la misma impor-tancia para todas las personas, lo que mucho depende del contexto donde se desenvuelve, de la profesi n o campo de acci n donde desarrolla sus actividades, esto de ninguna manera quiere decir que unos sean m s importantes que otros, todos pueden tener aplicaci n o servir de base para determinadas acciones, normas o leyes, por otra parte las situaciones son cambiantes en el tiempo y en el espacio, lo que es aceptado en un lugar no lo es en otro, lo que es v lido en una poca es rechazado en axiolog a se puede comparar al triage en los pacientes politraumatizados, en el que de acuerdo con el n mero y gravedad de las lesiones, se catalogan y jerar-quizan seg n la accesibilidad a los hospitales.


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