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Yo y la energía www.librosmaravillosos.com Nikola Tesla

Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 1 Preparado por Patricio Barros Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 2 Preparado por Patricio Barros Rese a Por primera vez en espa ol, dos textos escritos por Nikola Tesla (1856), el hombre que ha pasado a la historia como el paradigma del cient fico genial y visionario. Re ne "My Inventions", la autobiograf a escrita por el inventor en 1919, publicada en seis entregas por la revista 'Electrical Experimenter'; y un curios simo texto vanguardista, donde desarrolla sus geniales ideas sobre el futuro y la energ a: "The Problem of Ingreasing Human Energy", publicado por la revista 'Century' en 1900.

Parte I. Yo y la energía 1. Presentación superhéroe Tesla 2. Las mil caras de Tesla 3. La incumplida promesa del futuro 4. Cuando el mago decepciona 5. De gatos, perros, palomas y reos 6. El triunfo de la voluntad 7. Primer avistamiento del superhéroe 8. Hacia la ciudad blanca 9. Humanos ilustres, héroes y marcianos 10.

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1 Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 1 Preparado por Patricio Barros Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 2 Preparado por Patricio Barros Rese a Por primera vez en espa ol, dos textos escritos por Nikola Tesla (1856), el hombre que ha pasado a la historia como el paradigma del cient fico genial y visionario. Re ne "My Inventions", la autobiograf a escrita por el inventor en 1919, publicada en seis entregas por la revista 'Electrical Experimenter'; y un curios simo texto vanguardista, donde desarrolla sus geniales ideas sobre el futuro y la energ a: "The Problem of Ingreasing Human Energy", publicado por la revista 'Century' en 1900.

2 Una lectura para reflexionar sobre la energ a, la creaci n y las corrientes sociales, de la mano "del padre de la tecnolog a moderna". Miguel ngel Delgado (Oviedo, 1971), cr tico cinematogr fico y experto en "tesliana", presenta al personaje de Tesla como un icono del siglo XXI, y analiza su impacto en la cultura, la ciencia, las modas, los medios y la iconograf a de nuestro tiempo. Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 3 Preparado por Patricio Barros ndice Parte I. Yo y la energ a 1. Presentaci n superh roe Tesla 2. Las mil caras de Tesla 3.

3 La incumplida promesa del futuro 4. Cuando el mago decepciona 5. De gatos, perros, palomas y reos 6. El triunfo de la voluntad 7. Primer avistamiento del superh roe 8. Hacia la ciudad blanca 9. Humanos ilustres, h roes y marcianos 10. La doble transformaci n del mundo 11. Se ales en Colorado 12. La utop a muere en Wardenclyffe 13. Luz que se apaga 14. La persistencia de Nikola Tesla Agradecimientos Parte II. Mis inventos 15. Mi infancia 16. Nikola Tesla , el hombre, por H. Gernsback 17. Mis primeros esfuerzos como inventor 18. Mis ltimos intentos 19. El descubrimiento del transformador y de la bobina de Tesla 20.

4 El transmisor de aumento Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 4 Preparado por Patricio Barros 21. El arte de la teleautom tica Ap ndice: El problema de aumentar la energ a humana (1900) Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 5 Preparado por Patricio Barros Parte 1 Yo y la energ a Cap tulo 1 Presentaci n superh roe Tesla Nuestras virtudes y nuestros defectos son inseparables, como la fuerza y la materia. Cuando se separan, el hombre no existe. Nikola Tesla El 18 de febrero de 2011, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, organiz una cena con algunos de los hombres m s poderosos de su pa s.

5 No eran militares, tampoco pol ticos; alrededor de la mesa se sentaban los nombres m s importantes de Silicon Valley, los que crean esas nuevas palabras y conceptos que pasan a integrar nuestras conversaciones en un tiempo r cord. La mayor a de ellos hab a alcanzado el xito en su juventud, y mientras algunos hab an pensado en revolucionar nuestra forma de vida, otros simplemente hab an dise ado alguna herramienta para facilitar un servicio que, con el tiempo, se hab a vuelto imprescindible. Con los m ximos responsables de Apple, Steve Jobs, y de Facebook, Mark Zuckerberg, a la cabeza, el selecto grupo inclu a a los Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 6 Preparado por Patricio Barros representantes de Google, Yahoo!

6 , Cisco, Oracle, Twitter o Obama, sentado entre ellos, seguramente les habl como un oficial arengar a a sus tropas, consciente de que sobre aquellas personas reca a la responsabilidad de la victoria en un campo especialmente sensible, y en el que Estados Unidos, por primera vez en mucho tiempo, se ve a desafiado: la innovaci n tecnol gica. Las mentes m s brillantes del mundo ya no ten an necesariamente el ingl s como lengua materna, sino que hablaban chino mandar n o hindi, y eso supon a una amenaza de cambio en las relaciones de poder.

7 El presidente Obama era consciente de que, en realidad, nada ocurre por primera vez. Hubo un tiempo en que una Europa adormecida por la contemplaci n embobada de sus siglos de gloria se despert de golpe al ver que un nuevo pa s, hasta entonces una colonia situada en el semicivilizado continente americano, le hab a tomado la delantera. Ya en 1858, para el entonces futuro presidente Abraham Lincoln, estaba claro que [nosotros], aqu en Am rica, pensamos que descubrimos, e inventamos, y progresamos de manera m s r pida que cualquier [naci n europea].

8 Ellos deben de pensar que esto es arrogancia; pero no pueden negar que Rusia nos ha llamado a nosotros para que le ense emos c mo construir buques de vapor y ferrocarriles . No en vano, para Lincoln los mayores avances de la civilizaci n hab an sido la escritura [..] la imprenta, el descubrimiento de Am rica y la introducci n del Derecho de Patentes .2 M s de ciento cincuenta a os despu s, el ltimo de sus sucesores en la Casa Blanca ten a claros qu 1 El Pa s, 19 de febrero de 2011, p.

9 33. 2 Citado por Charles R. Morris, The Tycoons, Holt, Nueva York, 2005, pp. 7-8. Yo y la energ a Nikola Tesla Colaboraci n de Sergio Barros 7 Preparado por Patricio Barros nombres deb an ser enarbolados para incentivar a sus compa eros de mesa: Esta es la naci n de Edison y los hermanos Wright, de Google y de Facebook; la innovaci n no es para nosotros solo un medio de cambiar nuestra vida, es nuestra forma de vivir . Obama acababa de trazar una l nea de continuidad que enlazaba dos de las marcas que m s han hecho por demostrar la profunda capacidad revolucionaria de la tecnolog a, con los descubrimientos que originaron el progresivo empeque ecimiento del mundo en el que a n estamos sumidos: la electricidad y la aeron utica.

10 Entre esos dos puntos se trazaba un arco de maravilla que por primera vez hab a puesto en manos de los seres humanos una capacidad sin precedentes para decidir su destino; que permit a superar los tab es que la naturaleza nos hab a impuesto (la incapacidad para dome ar los recursos naturales, la imposibilidad de volar); y que hab a dado los primeros pasos en la construcci n de un nuevo marco de relaciones sociales, quiz germen de unos cambios m s profundos por venir. Y sin embargo, no era este el nico aspecto que compart an dos pocas aparentemente tan separadas.


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