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El suelo es un recurso no renovable - fao.org

Retos pRIncIpalesel suelo es un recurso no renovablesu conservaci n es esencial para la seguridad alimentaria y nuestro futuro sostenible El suelo es un recurso finito, lo que implica que su p rdida y degradaci n no son reversibles en el curso de una vida humana. En cuanto componente fundamental de los recursos de tierras, del desarrollo agr cola y la sostenibilidad ecol gica, es la base para la producci n de alimentos, piensos, combustibles y fibras y para muchos servicios ecosist micos esenciales. Sin embargo, pese a que es un recurso natural muy valioso, a menudo no se le presta la debida atenci n. La superficie natural de suelos productivos es limitada y se encuentra sometida a una creciente presi n debido a la intensificaci n y el uso competitivo que caracteriza el aprovechamiento de los suelos con fines agr colas, forestales, pastorales y de urbanizaci n, y para satisfacer la demanda de producci n de alimentos, energ a y extracci n de materias primas de la creciente poblaci n.

Retos pRIncIpales el suelo es un recurso no renovable su conservación es esencial para la seguridad alimentaria y nuestro futuro sostenible E l suelo es un recurso

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1 Retos pRIncIpalesel suelo es un recurso no renovablesu conservaci n es esencial para la seguridad alimentaria y nuestro futuro sostenible El suelo es un recurso finito, lo que implica que su p rdida y degradaci n no son reversibles en el curso de una vida humana. En cuanto componente fundamental de los recursos de tierras, del desarrollo agr cola y la sostenibilidad ecol gica, es la base para la producci n de alimentos, piensos, combustibles y fibras y para muchos servicios ecosist micos esenciales. Sin embargo, pese a que es un recurso natural muy valioso, a menudo no se le presta la debida atenci n. La superficie natural de suelos productivos es limitada y se encuentra sometida a una creciente presi n debido a la intensificaci n y el uso competitivo que caracteriza el aprovechamiento de los suelos con fines agr colas, forestales, pastorales y de urbanizaci n, y para satisfacer la demanda de producci n de alimentos, energ a y extracci n de materias primas de la creciente poblaci n.

2 Los suelos deben ser reconocidos y valorados por sus capacidades productivas y por su contribuci n a la seguridad alimentaria y al mantenimiento de servicios ecosist micos fundamentales. La degradaci n de los suelos es causada por usos y pr cticas de ordenaci n de la tierra insostenibles y por fen menos clim ticos extremos resultantes de diferentes factores sociales, econ micos y de gobernanza. Hoy, el 33 por ciento de la tierra est moderada o altamente degradada debido a la erosi n, la salinizaci n, la compactaci n, la acidificaci n y la contaminaci n de los suelos por productos qu micos. La tasa actual de degradaci n de los suelos amenaza la capacidad de las generaciones futuras de atender sus necesidades m s b sicas. Se estima que las tendencias demogr ficas y el crecimiento previsto de la poblaci n mundial (que superar los 9 000 millones en 2050) dar n lugar a un aumento del 60 por ciento de la demanda de alimentos, piensos y fibras para 2050.

3 Existen pocas posibilidades de ampliaci n de la superficie agr cola, excepto en algunas partes de frica y Am rica del Sur. Gran parte de la tierra restante no es apta para la agricultura y los costes ecol gicos, sociales y econ micos de convertirla en productiva ser an muy altos. Por tanto, el manejo sostenible de los suelos agr colas del mundo y la producci n sostenible son imprescindibles para invertir la tendencia de degradaci n de los suelos y garantizar la seguridad alimentaria actual y futura del mundo. FAO/Olivier Asselint RmInos clave c mo poDemos salvaR nuestRos suelos?El uso y manejo sostenible de los suelos se relaciona con muchos mbitos diferentes del desarrollo sostenible: reducci n de la pobreza, erradicaci n del hambre, crecimiento econ mico y protecci n del medio ambiente. El fomento del manejo sostenible de los suelos puede contribuir a la salud de los suelos y, de este modo, a los esfuerzos de erradicaci n del hambre y la inseguridad alimentaria y a la estabilidad de los ecosistemas.

4 Existe una necesidad urgente de detener la degradaci n de la tierra en sus diferentes formas y establecer marcos para sistemas de manejo sostenible de los suelos. Ofrecer tecnolog as adecuadas, pol ticas sostenibles e inclusivas, programas de extensi n eficaces y sistemas de educaci n s lidos para que se produzca m s con menos. Incluir proyectos de protecci n y recuperaci n de suelos y de gesti n sostenible de la tierra en los mercados emergentes actuales que aportan un valor econ mico a las actividades que producen servicios ecosist la creciente necesidad de conservar los suelos y tener gobiernos que realicen las inversiones pr cticas de gesti n para la adaptaci n al cambio clim tico y la mitigaci n de sus efectos, y la capacidad de resistencia frente al cambio de los patrones meteorol gicos y los fen menos clim ticos regulaciones estrictas y controles eficaces por parte de los gobiernos para limitar la acumulaci n de contaminantes por encima de los l mites fijados para la salud humana y, a la larga, sanear los suelos la superficie sujeta a pr cticas de manejo sostenible del suelo .

5 Mejorar la recuperaci n de los suelos degradados y promover la intensificaci n de la producci n sostenible a trav s de recursos biol gicos adaptados, el aumento de la fertilidad de los suelos, el uso eficaz del agua, el uso sostenible de insumos y el reciclaje de los subproductos agr colas. Apoyar el fomento de sistemas nacionales de informaci n sobre los suelos para contribuir a la toma de decisiones sobre el uso sostenible de la tierra y los recursos naturales. Aumentar las inversiones en el manejo sostenible de los suelos mediante la superaci n de obst culos, como la seguridad de la tenencia y los derechos de los usuarios, y el acceso a los conocimientos y los servicios financieros. Fortalecer la aplicaci n de los programas de desarrollo de capacidades y educaci n en materia de manejo sostenible de n de tierras, se refiere a todas las operaciones, pr cticas y tratamientos utilizados para proteger la tierra y aumentar los bienes y servicios proporcionados por el ecosistema del que la tierra forma parte.

6 Manejo de suelos, es una parte integrante de la ordenaci n de tierras y puede centrarse en las diferencias de los tipos y las caracter sticas de los suelos para determinar intervenciones espec ficas encaminadas a aumentar la calidad de los suelos en funci n del uso previsto de la tierra. Degradaci n de suelos, se define como el cambio del estado de salud de los suelos derivado de una disminuci n de la capacidad del ecosistema de proporcionar bienes y servicios a sus y pol ticas de suelos, se refieren a las pol ticas y estrategias y a los procesos de toma de decisiones por parte de los Estados nacionales y los gobiernos locales sobre el modo de utilizar los suelos. En al mbito mundial, la gobernanza de los suelos se ha centrado en la agricultura debido al aumento de la inseguridad alimentaria en las regiones m s pobladas de la Tierra.

7 Servicios ecosist micos, se definen como los beneficios que los ecosistemas proporcionan a los seres humanos. Pueden cumplir muchas funciones, entre ellas, de apoyo (p. ej., formaci n de suelos, clico de los elementos nutritivos, producci n primaria), de abastecimiento (p. ej., alimentos, agua dulce, combustible, fibra, productos bioqu micos, recursos gen ticos), de regulaci n (p. ej., regulaci n del clima, regulaci n de enfermedades, regulaci n del agua, purificaci n del agua, polinizaci n), cultural (por ejemplo, espiritual y religiosa, de recreaci n y turismo ecol gico, est tica, de inspiraci n, educativa, sentido del placer, legado cultural). Salud del suelo , que se ha definido como la capacidad continua del suelo de funcionar como un sistema vivo vital, dentro de los l mites de los ecosistemas y del uso de la tierra, para sostener la productividad biol gica, promover la calidad del aire y el agua, y mantener la salud vegetal, animal y humana.

8 El Grupo t cnico intergubernamental sobre los suelos de la Alianza Mundial sobre los Suelos recomienda las siguientes medidas:Programa de gesti n transfronteriza de los agroecosistemas de la cuenca del KageraEl Programa de gesti n transfronteriza de los agroecosistemas de la cuenca del Kagera (Kagera PGTA) es un proyecto regional que abarca cuatro pa ses de frica oriental que comparten la cuenca del Kagera, a saber: Burundi, Rwanda, Tanzan a y Uganda. Los ecosistemas agr colas de la regi n est n sometidos a una presi n creciente debido al cambio clim tico, el r pido crecimiento de la poblaci n y la intensificaci n de la producci n agr cola y ganadera: las tierras y los recursos de agua dulce de la cuenca resultan amenazados por la degradaci n de la tierra, la disminuci n de la capacidad productiva, la deforestaci n y el avance de la agricultura hacia las tierras h medas.

9 La finalidad del proyecto Kagera PGTA es adoptar un enfoque ecosist mico integrado para la gesti n de las tierras en la cuenca del Kagera con miras a producir beneficios locales, nacionales y mundiales, particularmente la mejora de la seguridad alimentaria y de los medios de vida rurales. Las principales prioridades del programa son la recuperaci n de las tierras degradadas, la fijaci n del carbono, la adaptaci n al cambio clim tico y la mitigaci n de sus efectos, la protecci n de las aguas internacionales, la conservaci n de la biodiversidad agr cola y la mejora de la producci n agr cola sostenible. Entre los enfoques y m todos que se est n introduciendo se encuentran las escuelas de campo para agricultores, la planificaci n comunitaria activa, la gesti n transfronteriza, la gesti n de cuencas hidrogr ficas, la innovaci n y adaptaci n de la gesti n sostenible de tierras, instrumentos para la evaluaci n de los recursos de tierras y el pago por los servicios a los ecosistemas.

10 Iniciativa de la Gran Muralla VerdeSe estima que los medios de vida del 83 por ciento de los habitantes rurales del frica subsahariana dependen de la tierra, pero hoy el 40 por ciento de las tierras africanas se encuentra degradada. La pobreza, el hambre, el desempleo, la migraci n forzada, los conflictos y las cuestiones de seguridad son algunas de las muchas amenazas derivadas de esta situaci n. Aprobada en 2007 por los Jefes de Estado y de Gobierno, la Iniciativa de la Gran Muralla Verde del S hara y el Sahel (IGMVSS) tiene como objetivo hacer frente a los efectos perjudiciales de la degradaci n de la tierra y la desertificaci n en la regi n sahelo-sahariana mediante el apoyo a las comunidades locales en la gesti n y el uso sostenibles de bosques, pastizales y otros recursos naturales de las tierras secas. Se han establecido planes de acci n en Burkina Faso, Chad, Djibouti, Eritrea, Etiop a, Gambia, Mal , N ger, Nigeria y Senegal, mientras que se est n preparando los de Argelia, Egipto, Mauritania y Sud n.


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